Escala de largo plazo
AAA: las emisiones o emisores calificados en “AAA” nacional, presentan una excelente capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. No presentan vulnerabilidad en su desempeño económico y financiero, con relación a cambios previsiblemente menos favorables, en los entornos económicos y de negocios.
AA: las emisiones o emisores calificados en “AA” nacional, presentan una muy buena capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Presentan una baja vulnerabilidad en su desempeño económico y financiero, con relación a cambios previsiblemente menos favorables, en los entornos económicos y de negocios.
A: las emisiones o emisores calificados en “A” nacional, presentan una buena capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Presentan una mayor vulnerabilidad con respecto a las categorías superiores, en su desempeño económico y financiero, con relación a cambios previsiblemente menos favorables, en los entornos económicos y de negocios.
BBB: las emisiones o emisores calificados en “BBB” nacional, presentan una adecuada capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Presentan perspectivas de debilitamiento en su desempeño económico y financiero, con relación a cambios previsiblemente menos favorables, en los entornos económicos y de negocios.
BB: las emisiones o emisores calificados en “BB” nacional, presentan una débil capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Presentan alta exposición en su desempeño económico y financiero, con relación a cambios previsiblemente menos favorables, en los entornos económicos y de negocios.
B: las emisiones o emisores calificados en “B” nacional, presentan una muy débil capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Presentan muy alta exposición a entornos de negocios y económicos previsiblemente menos favorables.
CCC: las emisiones o emisores calificados en “CCC” nacional, presentan una vulnerable capacidad de pago de sus obligaciones comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Presentan una extrema exposición a entornos de negocios y económicos previsiblemente menos favorables. Podrían presentarse alteraciones en el cumplimiento de sus obligaciones.
CC: las emisiones o emisores calificados en “C” nacional, presentan una muy vulnerable capacidad de pago de sus obligaciones, comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Se considera una alta probabilidad de incumplimiento de sus obligaciones.
C: las emisiones o emisores calificados en “C” nacional, presentan una extremadamente vulnerable capacidad de pago de sus obligaciones, comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. Se considera que el incumplimiento de sus obligaciones podría ser inminente.
D: las emisiones o emisores calificados en “D” nacional, se encuentran en situación de incumplimiento de sus obligaciones.
Escala de corto plazo
A1: las emisiones o emisores calificados en “A1” nacional, implica la más sólida capacidad de pago de los compromisos financieros comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales.
Cuando las particularidades y características de la emisión o emisor sean extremadamente sólidas se adicionará a la categoría el signo “+”.
A2: las emisiones o emisores calificados en “A2” nacional, implican una satisfactoria capacidad de pago de los compromisos financieros comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales.
A3: las emisiones o emisores calificados en “A3” nacional, implican una adecuada capacidad de pago de los compromisos financieros comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. En el corto plazo son vulnerables ante cambios en las condiciones económicas, del sector o en el emisor, comparadas con aquellas de más alta calificación.
B: las emisiones o emisores calificados en “B” nacional, implican una incierta capacidad de pago de los compromisos financieros comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. En el corto plazo presentan una mayor vulnerabilidad ante cambios en las condiciones económicas, del sector o en el emisor.
C: las emisiones o emisores calificados en “C” nacional, implican una incertidumbre respecto de la capacidad de pago de los compromisos financieros comparativamente con otras emisiones o emisores nacionales. La capacidad de cumplimiento depende estrechamente de un favorable entorno económico y operativo.
D: las emisiones o emisores calificados en “D” nacional, implican un inminente incumplimiento o que el mismo ya se encuentra efectivo.